martes, marzo 14, 2006

sólo a él

Sólo a él, entre tantos otros que miré, entre tantos otros que me observaron, me hubiera gustado detener. Conocerlo con mis manos: las venas de sus brazos, la manzana en su garganta, los vellos de la nuca. Rastrear sus huesos y la sangre. Con los dedos penetrar su ombligo, pellizcar sus pezones. Rascarle la espalda con mis uñas de rascar.

Sólo a él me hubiera gustado lavarle el cuerpo.

Un hombre viejo (el color de sus sábanas) viene en dirección contraria (las estrellas), a la orilla (de la ventana junto a su cama) del mar. Pasa su cuerpo (de qué manera) junto al mío (se acurruca). Después me vuelco (para dormir), lo miro alejarse.

Nunca más.

3 Comments:

Blogger Unknown said...

¿Nunca mas porque asi lo decidiste?

5:54 p.m.  
Blogger jorge angel said...

Intenso, vibrante, llegué por recomendación de Karen (joup), ahora volver se ha convertido en necesidad.

besos

10:08 a.m.  
Blogger lucian de silenttio said...

me deja con la sensación de uñas a la espalda...

1:06 p.m.  

Publicar un comentario

<< Home