miércoles, marzo 09, 2011

Casi nada

Se fueron los carnavales. Padre entre cerros, allá tan lejos, en aquella casa que era la casa de su padre. Yo en cambio aquí, tan lejos, con los hijos en esta ciudad que fue la ciudad de mi madre, cuando vivía su abuela y ella maniataba sus cabellos en una trenza gruesa. Poco, casi nada dice ella de ese tiempo.

Cuando nos atrapa el silencio nos veo, a los hijos y a mí, bufando casi vencidos apenas por encima del agua.