miércoles, noviembre 06, 2013

la verdad

yo pude callar el sí y decir solamente la más pura y triste verdad. recuerdo ese día. esa tarde me di cuenta que el juego había empezado, cuando empezó. y todo el tiempo fui consciente del artilugio en su voz suave en su sorprendente confesión
el nombre de las cosas
pude decir que sí pero hubiera mentido. dije que no y dije la verdad. desde entonces caminar atravesando los días
el nombre de las cosas
para mí, decir que no, era cuestión de
fidelidad

después una se despide y se marcha, porque todo termina y es así como debe ser. está bien despedirse y marcharse liviana, como llegando. sobre las mismas pisadas encontrarás el camino a tu casa

el nombre de las cosas
volviendo a casa
es bueno siempre empezar